Los tractores son vehículos considerados especiales y autopropulsados, con la finalidad de arrastrar o empujar remolques, embarcaciones, maquinaria y carga que sea pesada y que no pueda transportarse de otra manera. Dentro de los tractores existen diferentes clasificaciones, que pueden ser por el sector de trabajo, la rodadura o adherencia al suelo y la actividad a desarrollar. Dentro de esta última encontramos los tractores grandes, medianos y pequeños.

 

La potencia de los tractores pequeños suele entre los 35 y los 40 CV. La finalidad para la que suelen destinarse son los terrenos de poca extensión, como los huertos, que no tienen unas necesidades elevadas de mantenimiento.

 

Características generales de un tractor pequeño

Los tractores pequeños pueden ser de simple tracción, que están indicados para terrenos irregulares y pequeñas huertas, y los de doble tracción, cuyas ruedas pueden ser iguales o desiguales. Aquellos con las ruedas iguales son articulados para poder facilitar las maniobras que se llevan a cabo. Tienen la ventaja de que se pueden utilizar en los mismos terrenos que los de las desiguales.

 

En el caso de estos, suelen ser tractores rígidos, indicados para los terrenos con pendiente, o bien suelos húmedos. En cualquier caso, también están destinados a las huertas pequeñas.

 

Ventajas de tener un tractor pequeño

Disponer de un tractor pequeño nos facilita la realización de tareas complejas. En cuanto a los tractores de doble tracción, tienen un rendimiento superior a los de tracción simple, gastan menos combustible, pueden desempeñar trabajos mucho más complejos, patinan menos y las pérdidas de rodadura son menores.

 

Qué tener en cuenta al comprar un tractor pequeño de segunda mano

Dado que el precio de los tractores es bastante elevado, lo más común es que los encontremos disponibles en el mercado de segunda mano. Al ser necesario registrar esta maquinaria, bien sea nueva o de segunda mano, hay que contar con todos los datos referentes al tractor que tenemos pensado comprar.

 

El primer punto a tener en cuenta es el uso que le vamos a dar. Esto es la frecuencia, el tipo de suelo o la dureza de este. Los tractores pequeños están indicados para superficies pequeñas, y si son de segunda mano, su uso no será constante. En este casi, se recomienda optar por uno nuevo.

 

En lo que respecta al modelo que vayamos a comprar, se recomienda verificar la facilidad para encontrar recambios antes de dar el paso. Si se nos presenta una avería y los recambios no son accesibles, el coste terminará siendo mucho mayor.