Aire acondicionado portátil de segunda mano

El aire acondicionado portátil es una alternativa muy cómoda frente a los sistemas de aire acondicionado tradicionales. A diferencia de estos últimos, no necesitan de un profesional para su instalación, lo que incrementa el coste de la adquisición.

 

Si deseamos enfriar una estancia de forma sencilla, el aire acondicionado portátil es nuestra opción. Basta con enchufarlos a la corriente eléctrica y podremos disfrutar de todas las ventajas que nos ofrece.

 

Características generales del aire acondicionado portátil
El aire acondicionado portátil es una bomba de calor; absorbe el calor de una fuente y lo transmiten a otra a través de la electricidad. Reducen la temperatura de manera drástica y artificial en un espacio determinado.

 

Este tipo de artefactos necesitan expulsar el aire caliente que han absorbido. Para ello, llevan incorporado un conducto que suele colocarse en una ventana. Así, el calor es expulsado al exterior y no entra en contacto con la zona a refrigerar. Algunos utilizan el ciclo inverter y son capaces de aportar calor durante el invierno.

 

Ventajas del aire acondiciona portátil
La principal ventaja es que nos ahorramos la instalación de estos. Además de que puede ser compleja, supone un coste extra que sumamos a la adquisición. Al ser móviles, podemos cambiarlos de estancia con facilidad, e incluso transportarlos de un lugar a otro.

 

Gracias a ellos, podremos despedirnos de los golpes de calor y la incómoda sensación en el interior de nuestra vivienda. Así, además disfrutar de una temperatura agradable durante el día, mejoraremos nuestro descanso por las noches.

 

Qué tener en cuenta al comprar un aire acondicionado portátil de segunda mano
Al tratarse de un sistema que funciona al conectarse a la red eléctrica, resulta muy sencillo verificar el estado en el que se encuentra el aparato. Lo ideal sería entonces verificar su funcionamiento antes de la compra.

 

Se recomienda también consultar la fecha de adquisición. Sería interesante disponer de la factura y conocer si ha sufrido averías en el pasado. Comprobaremos que el tubo y el aparato en sí se encuentran cuidados y en buen estado, libres de golpes, suciedad incrustada y otros daños que puedan afectar a su rendimiento.