Patines en línea de segunda mano

Los patines en línea son un tipo especial de patines, caracterizados porque en su parte inferior las ruedas que permiten desplazarse con ellas van colocadas una  tras otra, en hilera. También conocidos como rollers, pueden llevar de dos a cuatro ruedas, además de un freno en la parte inferior trasera, detrás de la última de las ruedas del patín. Generalmente es de caucho, y sirve para reducir su velocidad.

Las ruedas van unidas a unas botas para los pies, habitualmente de caña media o alta. Están pensadas para proteger el tobillo en caso de caída o accidente, pero siempre permiten la realización de un cierto movimiento. Bajo la bota, en su suela, va una guía, sobre la que se montan las ruedas. De esta forma estas se mantienen alineadas y en su lugar.

Dentro de los patines de línea podemos encontrar de varios tipos: de iniciación, avanzados, de estilo libre y de agresivo. Los primeros, como su nombre indica, están pensados para comenzar en el patinaje en línea y también para usarlos para paseo en ciertas superficies lisas. Por ejemplo, el asfalto. Tienen unas ruedas más grandes para más estabilidad y freno de taco. Los avanzados tienen guías cortas y con ellos se puede tanto deslizarse con velocidad como dar saltos. La mayoría incorporan sistemas de amortiguación, encargados de absorber el impacto del golpe de los patines en línea contra el suelo cuando se salta con ellos.

Los patines en línea de estilo libre no tienen freno de taco y llevan ruedas duras. Sus guías son las más cortas de todos los tipos de patines en línea. Sirven para realizar acrobacias y trucos. Por ejemplo, para moverse entre filas de determinados objetos, como conos de señalización. En cuanto a los patines de agresivo tienen ruedas muy pequeñas y un diseño específico para absorber los impactos de los golpes que reciban sin resultar dañados.

Qué tener en cuenta al comprar patines en línea de segunda mano

• Lo primero es informarte del tipo de características que han de tener los patines en línea que quieras comprar, para comprobar que efectivamente los que te venden corresponden con él. Para ello has de fijarte en ruedas, guías, si tiene o no taco de freno, etc.
• La bota del patín debe quedar bien, y el pie en su interior no debe estar apretado. Una vez metido el pie revisa que los ajustes y fijaciones funcionan correctamente y cierran bien.
• Echa un vistazo a las ruedas para comprobar que no están excesivamente desgastadas y que todas giran sin obstáculos.
  Para evitar accidentes también hay que cerciorarse de que  las ruedas están perfectamente alineadas, y que están bien fijadas a la guía y está a la bota.